
Pilar Garrido parte de sus propios recuerdos para hacer un recorrido por la posguerra española, con la intención de entretener al público y -con la ayuda de los geniales dibujos de su marido- darle un toque de humor a una infancia dura, que fue la de muchos españoles. Desde los domingos en misa hasta los juegos infantiles, pasando por las tardes en casa tomando el té o la visita de Carmencita Martínez Bordiú al colegio, la autora ha logrado hacer un autentico libro de historia cotidiana, ilustrado por un genuino "corresponsal gráfico" de la época: Forges. Esta es la microhistoria de los años que siguieron a la guerra civil, escrita sin amargura ni sesgo alguno y sí con humor e incluso cierta nostalgia por un tiempo libre y gris que ya nunca volverá.
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